top of page

EL CAMINO A LA GOBERNANZA GLOBAL

Abril 18, 2024


Columna Editorial

Por: Isabel Cuervo

 

 Mas de 10 millones de personas han entrado ilegalmente a los Estados Unidos desde que Joe Biden llegó a la Casa Blanca, pero el Secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, se ha salvado de un juicio político, hace tan solo unas horas.

 

Más de 10 millones, según datos de la oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, han entrado por la frontera abierta de Mayorkas y Biden. Escandaloso número que no refleja los miles mas que han entrado sin haber sido detectados por las autoridades que hoy, mas que nunca, se encuentran de brazos cruzados, impedidos de cumplir su deber y labor de proteger y cuidar las fronteras y la seguridad nacional, porque así lo ordena Mayorkas.

 

Pero el Senado, controlado por el partido Demócrata, ha votado a favor de anular los dos artículos de juicio político contra el Secretario de Seguridad Nacional, cuando el juicio apenas comenzaba. Los artículos acusaban a Mayorkas de no impulsar el cumplimiento de las leyes de inmigración, de mentirle al Congreso sobre los datos reales de migración y de obstruir la supervisión del Departamento de Seguridad Nacional.

 

Después del juicio político en la Cámara, el trabajo del Senado era el de escuchar los cargos y determinar si la Mayorkas debía ser condenado y destituido de su cargo, pero decidieron que debía ser absuelto por no haber cometido “delitos graves ni faltas menores”, aunque mas de 10 millones de indocumentados detectados y liberados, ya supera la población total de 36 estados, de los 50 que tiene los EE. UU.

 

Como migrante, debo dejar claro que defiendo el derecho humano de migrar y vivir en cualquier lugar del mundo, pero la migración tiene un apellido y este debe ser: legal.

 

Permitir que una avalancha de millones de personas no identificadas entren sin cumplir los procesos legales a un país, es un atentado directo a la seguridad publica de ese país y de los mismos migrantes que están siendo utilizados por traficantes humanos, mientras criminales se mezclan entre ellos.

 

En 2018 se calculó que mas de 22 millones de indocumentados transitaban las arterias ocultas de los Estados unidos, según estudio de la universidad de Yale.  Estudio pagado y elaborado por 3 diferentes organizaciones, todas a favor de la migración ilegal, irregular e indocumentada. Es decir, a favor del negocio multimillonario y antihumano del trafico humano.  Pero estudio que, aun hoy, ocultan los medios hegemónicos porque consideran que podría ayudar a afianzar lo que afirma Donald Trump, en medio de su campaña por volver a la presidencia, con respecto a la migración oculta y ya dentro de los EE.UU.

 

Migración sin ningún control ni identificación, con todos los peligros y afectaciones sociales y económico-políticas que ello acarrea, para los estadounidenses y los migrantes que sí han seguido la vía legal.

 

En pleno año electoral, bien vale la pena anotar que el partido Demócrata es el partido que impulsa la campaña de votar sin necesidad de presentar un documento de identidad.

¿Como lo impulsa? Como un derecho.  Argumentando que el partido Republicano lo que desea es impedir el derecho al voto. Osea, ¿un indocumentado podría votar en varios de los estados de este país? Si.  

 

Al día de hoy, en 35 de los 50 estados de los EE. UU, se exige que los votantes se presenten con una identificación para poder emitir su voto. 24 de estos estados requieren una identificación con fotografía, pero 11 estados aceptan identificación sin foto. Los 16 estados restantes ni siquiera requieren que los votantes presenten una identificación, como, por ejemplo, California, Illinois, Maine, Maryland, Minnesota, Nevada, New Jersey, Nuevo México, Nueva York o Massachusetts. Varios de estos, estados decisorios.

 

Las cuentas son simples y la estrategia también.

 

¿Por eso el desmedido afán de abrir la frontera y dejar pasar a millares que a su vez sirven de alimento a coyotes, traficantes de personas, armas, drogas y órganos humanos?

Aquí hay varios negocios andando, no solamente el político, y todos son ilícitos.

 

Ya con las principales ciudades de esta nación invadidas por indocumentados no identificados y en muchas ciudades regentadas por demócratas, con mas derechos que los ciudadanos, comienzan a evidenciarse los obvios resultados de la implosión controlada.

 

Miles se manifiestan en las calles, se quejan de los refugios ofrecidos y exigen que les den viviendas permanentes, pero hay otros que directamente han comenzado a invadir propiedad privada, como fue el caso del inmigrante indocumentado Leonel Moreno, tiktoker venezolano que entró de manera ilegal a los EE. UU. y tomó gran popularidad en redes sociales enseñando cómo delinquir en el país que lo acogía.

 

Y se acoge a millones como él porque estamos bajo la anuencia de la actual des-administración de Joe Biden de recibir millones de indocumentados, dejarlos circular por el país sin control y sostenerles vivienda, alimentación, educación y servicios de salud con dinero de los contribuyentes que, estupefactos, han visto llegar mezclados con migrantes necesitados, la violencia y el crimen organizado hasta las puertas de sus casas.

 

El histriónico delincuente, Leonel, no solo “enseñaba” cómo vivir del dinero publico, si no que también invitaba a la invasión de propiedades en los Estados Unidos.  Además, explotaba la imagen de su pequeña hija asegurando, falsamente, que el Gobierno le pagaba $5,000 dólares mensuales por tener una ciudadana estadounidense, mientras se burlaba de los ciudadanos que trabajan honestamente, diciendo que él sí sabía cómo vivir de las ayudas de gobierno.

 

Leonel Moreno, con gran sorna, dijo en uno de sus videos que amigos suyos “ya se han apoderado de unas siete casas”, y afirmaba que la única manera de que los inmigrantes no vivan en las calles ni sean una “carga pública” era el “apoderarse” e “invadir” propiedades abandonadas.

 

Las leyes de “derechos de los ocupantes ilegales” existen en los 50 estados de los EE. UU. y están siendo utilizadas por inmigrantes indocumentados, provocado una verdadera crisis. Los ‘ocupantes ilegales en serie’ están invadiendo casas y atacando familias indefensas que, en ocasiones, están siendo expulsadas de sus propias viviendas por delincuentes que se apoyan en estas leyes impulsadas por desgobiernos demócratas.

 

Un caso reciente es el de Adele Andaloro, quien fue arrestada en Nueva York cuando estaba intentando cambiar la cerradura de la casa de sus padres, en Queens.  La propiedad valorada en un millón de dólares había sido invadida, luego de que sus padres murieron, y no se sabe cuánto llevaban allí los invasores.

 

“Descubrí que hay una ley que dice que, si una casa no está habitada, podemos expropiarla”, dijo Leonel en otro de sus vídeos. La ley se aplica a “la invasión de tierras y ese será mi próximo negocio, invadir casas abandonadas”. Y los videos siguen visibles en sus redes sociales, incentivando el crimen.

 

Como el que ocurrió fatalmente hace tan solo dos semanas atrás, también en Nueva York.  Nadia Vitel, fue brutalmente golpeada y asesinada por dos delincuentes, cuando los descubrió escondidos dentro del apartamento de lujo de su difunta madre, ubicado en la calle 31 del este de Manhattan.

 

El cuerpo de esta mujer, de 52 años, fue encontrado en una bolsa de lona, en el mismo apartamento, por su propio hijo de 19 años. En los videos de vigilancia se ve a un hombre y una mujer de unos 20 años, huir del lugar luego del asesinato y tomar la camioneta Lexus de Vitel para escapar.  Al día de hoy siguen sin ser aprehendidos.

Los derechos de ocupante ilegal, también conocidos como ‘posesión adversa’, permiten que alguien que habita una propiedad ilegalmente continúe usándola u ocupándola si el propietario legal no toma medidas contra él dentro de un período de tiempo determinado, que varía según el estado y oscila entre 7 y más de 20 años.

 

La ciudad de Nueva York dice que tiene una visión “más progresista” de la ley y por eso permite que una persona pueda reclamar derechos de ocupante ilegal, luego de tan solo 30 días de haber invadido una casa.

 

Así, estas leyes estarían protegiendo el delito y a el delincuente, en lugar de proteger a los dueños de su propiedad privada, a quienes también se les prohíbe cambiar las cerraduras, cortarles los servicios públicos o retirar las pertenencias de los ocupantes ilegales, de su propiedad.

 

Ciudadanos de varios estados han pedido al FBI y al Departamento de Seguridad Nacional que actúen, pero insólitamente lo que estamos viendo es la protección al delincuente, porque el país está siendo dominado por parámetros establecidos en la agenda globalista de abandonar al ciudadano, sin protección de las autoridades, sin protección de la ley y a merced del delito.

 

En los EE.UU.  el actual des-gobierno de Biden no sólo está permitiendo que esto suceda, está operando desde las tres ramas de poder el literal derrumbe de los Estados Unidos de América.

 

Estos derechos de los ‘okupas’, ya lo han padecido bien en España, Italia y otros países europeos que también han vivido presos bajo la filosofía de la desgobernanza global.

 

Como es el reciente caso de un español de 81 años, que ya lleva nueve meses en prisión preventiva y enfrenta una condena de 7 años y medio de cárcel por matar a un ladrón hondureño, que tenía 45 antecedentes penales en su haber y entró a su casa a robar, con una motosierra.

 

Abandonados a su merced, familias que han trabajado de sol a sol y honestamente toda su vida para tener un techo seguro, lo han perdido en un solo soplido.

 

El mismo modus operandi, el mismo descontrol de la migración convertida en invasión, no solo de personas, también invasión y colonización cultural y social.

 

Por ello, no es de extrañar que más de 50.000 inmigrantes ilegales hayan llegado a España a bordo de pateras tan sólo en 2023, la mitad de ellos de Senegal.

No es de extrañar ver cientos de chinos o latinoamericanos o africanos en Central Park o la 7ª. avenida de NY, exigiendo que no los saquen de los hoteles de lujo en donde son alojados hoy con el dinero de los contribuyentes neoyorkinos.

Hasta hoy, la ciudad de Nueva York ha gastado en tan solo los migrantes que solicitan asilo, $1,47 mil millones en 2023 y $2,18 mil millones, en lo que va de 2024.

 

Dinero público que debería estar siendo utilizado, por ejemplo, para cuidar de los ancianos que han pagando impuestos toda su vida, o para cuidar de los niños abandonados por padres presos hoy del fentanilo que entra por la frontera abierta de Biden, o para reconstruir escuelas y contratar mejores maestros no adoctrinadores, o para no dejar más veteranos abandonados a su suerte luego de que han servido a la patria, o para la reconstrucción de la obsoleta infraestructura de su ciudad, o su metro, por ejemplo…

 

Un metro invadido por delincuencia de alto calibre que domina el sistema de transporte público a punta de armas, violencia y terror. Violencia especialmente contra mujeres, que son golpeadas y abusadas con el silencio cómplice de las feministas de turno que, totalmente politizadas, prefieren callar ante hechos de extrema violencia como estos.

 

Una delincuencia que anda suelta y roba en tiendas de la gran manzana, San Francisco, Los Angeles o Chicago, todas ciudades regentadas por demócratas, que mantienen la ley de permisividad de robos de menor cuantía.  Si son menos de $950 dólares, los delincuentes no son perseguidos ni mucho menos aprehendidos, porque como dice, por ejemplo, la congresista demócrata, Ocasio Cortez, están llevando el pan a sus casas. 

 

Así se construye la validez del delito con aprobación de congresistas y representantes sentados en Washington DC, mientras se deconstruyen las naciones.

 

Grandes cadenas de tiendas como Wal Mart o Walgreens han huido despavoridas de estas ciudades, ocasionando cortes sustanciales en puestos de trabajo.  Ciudades santuario en proceso de muerte y extinción.

 

Leonel Moreno fue finalmente arrestado en marzo por ICE, el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas, en Ohio, pero quedan cientos, si no miles de Leoneles en las calles, ciudades y pequeños poblados de este país y queda Mayorkas sentado en la secretaría de Seguridad Nacional, fomentando la inseguridad nacional.

 

Mientras tanto, un paso mas se ha dado. La propiedad privada, pilar fundamentales del capitalismo, está siendo atacada. 

 

¿Si se pierden los derechos sobre de la propiedad privada en que se queda? En el dominio del gobierno sobre el bien privado, es decir, en comunismo. El sueño de Marx, la abolición de la propiedad privada.

 

Según las teorías marxistas clásicas, las sociedades pos-capitalistas pueden surgir como resultado de una “evolución espontánea a medida que el capitalismo se vuelve obsoleto” y este modelo obsoleto podría ser reemplazado por un sistema socialista, comunista o anarquista.

 

¿Aun crees que este caos económico y socio-político mundial, incentivado desde las altas esferas, es casual?

 

El camino a la gobernanza global esta siendo allanado.

 

72 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo
bottom of page